¿Qué te esta comiendo por dentro? Sobre la anorexia nerviosa
La anorexia, uno de los trastornos mentales más letales de todos los tiempos, sigue afectando a muchísimas personas de diferentes contextos alrededor del mundo.
La seriedad y el entendimiento de la anorexia ha mostrado un avance en los últimos años dentro de la comunidad científica y los medios de comunicación. Una persona con un desorden alimenticio desarrolla una relación insana con el alimento, volviéndolo su peor enemigo.
La percepción de los desórdenes alimenticios suele ser orientada a la idea de que las personas que lo poseen desean tener un cuerpo perfecto. Quizás, si fuera cierto, el trabajo necesario para tratarlo sería mucho más “sencillo”. Los desórdenes alimenticios no son exclusivamente sobre la vanidad y el peso. Son trastornos psicológicos en donde los pacientes tratan de controlar el conflicto o estímulo de estrés de sus vidas manejando lo que comen. Son síntomas de problemas más profundos.
El desarrollo de problemas y dificultades complejas puede venir de diferentes áreas de la vida de la persona, por ejemplo las personas que han crecido en un ambiente familiar en donde la delgadez es altamente valorada, las personas que no cuenta con soporte emocional en donde puedan apoyarse, las personas las cuales en su vida han perdido el control o temen perderlo en diferentes áreas tales como el trabajo, las amistades, la soledad, y ahora el peso si se encuentra fuera de control.
Sensaciones de ansiedad, dudas de uno mismo, fracaso, entre otros, se comienzan a asociar mentalmente con su peso. Pueden empezar vomitando como una manera de reconfortarse a sí mismos. Si se continúa agravando la situación con lo que comenzó siendo momentos difíciles, puede costarle la vida.
La anorexia nerviosa consiste en un patrón de inanición a la comida y falta de cumplir la necesidad hambre afectando popularmente a jóvenes mujeres.
La anorexia nerviosa es difícil de comprender desde la asociación directa sobre la dieta. El deseo de adelgazar se convierte en una obsesión, y el simple pensamiento de ser obeso es aterrador. Uno de los mayores problemas de la anorexia es que las personas pierden la habilidad de verse a sí mismos de manera objetiva, se sienten gordos sin importar su peso real, posiblemente tratando de lidiar con sentimientos de descontrol y sin poder. El número de la pesa llega a “determinar” si ha sido exitoso o un total fracaso en lo que “podría” controlar de su vida (peso).
A veces, el enfoque de perder peso puede bloquear sentimientos y emociones que resultan más difíciles de lidiar, que con una dieta, un pensamiento peligroso a esto puede ser el que “no merezco comer”, afectando al área del autoestima (o normalmente, viniendo de personas con una autoestima baja).
Una persona con anorexia puede negar que existe el problema o que hasta simplemente no tiene hambre, pueden pelear si se le ofrece ayuda, asociando la terapia como algo negativo que la obligará a comer.
Si acepta la ayuda puede tratarse de una manera multidimensional, empezando de lo psicológico, a lo médico y nutricional.
Si es que la persona no recurre ayuda, el programa puede agravarse con el paso del tiempo a uno mucho mayor de lo que estaba, puede acudir a las autolesiones (envenenamiento, cortes, etc.) y hasta llegar a la muerte debido a la insana alimentación (fallo al corazón, etc.) o a la misma autolesión.
Nota:
Si sufres de anorexia nerviosa u otro trastorno alimenticio, por favor busca ayuda con los respectivos centros de salud especializados en tu país, la salud puede ser costosa y un privilegio dependiendo del país o ciudad el cual vivas, pero existen diferentes organizaciones que ofrecen servicio humanitario y accesible que ofrezca un tratamiento efectivo. Las líneas de apoyo de tu país pueden ofrecerte mayor información, espero que a pesar de las dificultades puedan superar cualquier malestar como este y si necesitan simplemente hablar con alguien o buscar apoyo, me pueden contactar.
Con todo cariño, les deseo una buena vida y una sana relación con la comida y espero que no sea demasiado tarde.